Construimos a partir de conceptos. Entonces, comprendemos que el tiempo es tan sólo una ficción más. No existe otra cosa que el presente. "El pasado ya no está, el futuro es una ficción que siempre está por venir", o algo así decía el texto. Me cuestiono, indago, qué debería hacer. Si llamar, si hablar, si responder, si relatar. Si explicar de una vez que, en verdad, no hay constructo impulsor, sólo destrucción masiva del Ser hacia el fin único y necesario del reposo. Yo se que me leeré y no comprenderé nada de lo que escribo. Pero no hay historia, no hay herramienta mayor de comprensión que el entendimiento sobre la perpetuidad del presente, sobre la ausencia de distancias entre una generación y otra, sobre una experiencia y otra. Todas las experiencias son la misma experiencia. Todos los hombres son el mismo hombre, en ese instante preciso en que la sed se calma, en que la noche se da.
No me voy a escapar, porque no existo en lugar alguno. Soy la que estuve siendo cada día. Soy una caja musical sin lengua ni vulva.