21/11/09

a C.

14.
Me desnudo ante la negativa que callo
la loca (porque sí está loca)
se baña en la fuente del poema.
Las huesos de su cuerpo
mascar los huesos de su cuerpo.

12.
escaparme de mí para en mí
porque acercarme
me apena.

10.
Se enciende la noche
Ella teme la sucia mano
el artificio la reproduce
hasta la irrealidad del verbo.

9.
Su espalda se quiebra
autómata del cuerpo
deviene en cicatriz por mis dedos

8.
En el cristal solamente
la razón me introduce al silencio
aprendí a amar lo que duele.

7.
Se deshidrata la sombra
enfrenta la mirada pero escapa
lo que hay detrás
un nombre, el Nombre.

5.
   amour fou
mascar el tabaco de sus dedos
El tiempo es la ingenua yaga
del recambio.

4.
Bifurcación del sueño.
dos puertas, seis llaves
una espiral en el centro del poema.
Despertar
(porque hay que llamarlo de algún modo)

3.
Intelección de la extranjera lengua
extranjera clave
busco el centro en tu presencia
aunque tan lejano...

2.
Fricciona la imagen
perfora una, otra vez
sangra el jugo del éxodo.

1.
nazco y luego
dormir en el goce.

3 comentarios:

Ismael U. V dijo...

uhmm interesante, me gusto :)
Saludos

Ignacio Reiva dijo...

Tantas imágenes perfectas para un acto que es creador y desmaterializador a la vez. Me ha encantado. Un beso muy grande.

Anónimo dijo...

Uno
Pasos que corren en pos de su eco
Distracción abrupta de un enredo
La memoria finge que no está
La ausencia no tiene remedio

Dos
Andenes poblados de maletas sin destino
Pasajeros en tránsito inconexo
Hay campos de maíz paralelos a la vía
Hay postes que recuerdan que el tiempo es implacable

Tres
Te amé en otra vida que resultó ser ésta
Te ví con otro hombre que resulté ser yo
No puedo dejar de mirar entre tu blusa
La tierra húmeda trae su aroma como la única verdad absoluta

Cuatro
El verso pelea por encontrar tu sitio
Tu pelo se escurre como tiempo hecho pedazos
La noche nunca aportó luz a nada
Tu cara oculta vive en el reverso de tu nombre

Cinco
Sólo me amaste una vez y estaba ausente
Nunca vi mejor que con los ojos cerrados
El beso se derrama siempre entre dos labios
Afuera siempre hay gente que no sabe de nosotros